Participan biólogos de la UAS en trabajos de conservación de especies en la Reserva El Chirimole
Gracias al esfuerzo que realizan personas entusiastas y comprometidas con la naturaleza, en la Reserva El Chirimole, área natural protegida que se ubica enclavada entre los municipios de Cosalá, Elota y los límites de San Ignacio, la actividad del cuidado y preservación de tres especies de cactáceas en estatus de riesgo sigue vigente, compartió Gerardo Bojórquez Castro.
El profesor investigador de la Facultad de Biología, de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), quien recientemente recorrió este lugar en compañía de colegas biólogos, con el objetivo de conocer y reportar cómo se encuentran estas poblaciones, externó que otra actividad que realizan es conocer en qué circunstancias se encuentran las cámaras trampa que estratégicamente están establecidas en aquellas zonas más alejadas de la reserva.
“Los objetivos son muy claros: hacer revisión de la unidad de manejo ambiental en las que tenemos especies de las que estamos haciendo un plan de manejo desde hace unos años, Semarnat nos otorgó unos permisos como unidad de manejo ambiental y protección de la vida silvestre en los que estamos monitoreando poblaciones de tres cactáceas, como lo es la biznaga de marks, órgano pelón y la pitaya de Martínez, así como la amapa rosa de monte”, indicó.
Tras recorrer de 15 a 20 kilómetros de un área de 469 hectáreas, otra de las acciones que realizan es la recolección de la semilla de periquillo, con el único fin de que esta especie suplante al neem y otras especies exóticas que se encuentran instaladas en Sinaloa, puesto que es una especie regional que se adaptaría a las condiciones del estado en zonas debidamente adecuadas, como Culiacán, Mazatlán y Guamúchil, sin dejar de mencionar los municipios de Cosalá y San Ignacio que se desarrolla de manera natural.
En este recorrido de reconocimiento del área en el mantenimiento, debido a las cámaras trampa fue posible observar especies como el venado, coyote, zorra gris, jabalí, iguana negra, puma, tigrillo, mapache, ocelote, coati y el majestuoso jaguar, que gracias a los esfuerzos de conservación año con año ha aparecido en las cámaras, entre una variedad más común de especies.
Insistió en que esto de la conservación es algo que urge, como también urge un rescate de las especies, de la preservación de bosques y todos los ecosistemas en conjunto, por lo que ellos como biólogos por pasión y profesionalismo continúan trabajando en este sentido, y en algunos momentos solo cuidando de lo que existe, añadiendo y aplicando los conocimientos de los planes de manejo que a futuro pueden dar resultados efectivos y visibles.